martes, 22 de enero de 2013

Torneo de Discos 2012 / Fase de Grupos IV

Ay, hijos míos, qué difícil es sacrificar algunos discos. Pero tienen que caer, o esto no avanza. De modo que vamos allá.

Empezaremos con el Grupo 15, grupo engañoso donde los haya. Quién hubiera pensado que me iba a costar tanto elegir entre estos cuatro, y cada uno de ellos ha estado en algún momento clasificado para enseguida quedar descartado en favor del siguiente, a quien a su vez le ha quitado el puesto otro, aunque tampoco ha durado mucho porque el cuarto llegaba reclamando su lugar... Al final he dicho ¡basta! y he optado por dos, que son el Valtari de Sigur Rós y Black Cat Oil de Delta Moon.
Eso deja fuera a The Tallest Man on Earth, cuyo disco There’s no leaving now iba en cabeza hasta hace unas pocas horas en mis preferencias, en virtud de la inmediatez de 1904, single como podría haberlo sido perfectamente Revelation Blues o Criminals. Sin entrar en comparaciones con su anterior trabajo, dicen que superior a éste, There’s no leaving now son 10 canciones impecables, dominadas absolutamente por la intensa voz del más alto hombre en la tierra.
Mientras, al otro lado del mar... Hace un par de años tres miembros de The Decemberists, Chris Funk, Nate Query y Jenny Conlee, se hicieron un proyecto paralelo a la superbanda madre. En Black Prairie podían dar rienda suelta a su gusto por el bluegrass y el folk, y jugar con sonidos distintos. A Tear In the Eye Is A Wound In the Heart es su segundo álbum, y uno muy bueno por añadidura. Aciertan cediendo el protagonismo a la riqueza instrumental del quinteto, que consigue fácilmente evocar esas praderas a que hace referencia el nombre del grupo. De los 16 cortes que componen el álbum muchos son puramente instrumentales, como For the love of John Hartford o la saltarina Dirty river Stomp, una circunstancia que puede que le reste gancho, tan acostumbrados estamos a que nos guíe una voz por la música. Black Prairie tiene esa voz, que responde al nombre de Annalisa Tornfelt, una magnífica elección para evitar las comparaciones con The Decemberists ya que la naturalidad de esta violinista no tiene nada que ver con el histrionismo vocal a que nos tiene acostumbrados Colin Meloy. Ella canta con melancolía en Little Song Bird, con irresistible dulzura en Nowhere, Massachusetts y con inconfundible sabor country en cada una de sus apariciones. El tubo que os pongo es de una actuación acústica en la que interpretan las mentadas Dirty river Stomp y Nowhere y Massachusetts, además de Richard Manuel.


Otra alta concentración de buenos discos se ha dado en el Grupo 9. Escojo los dos discazos que han sacado Rush y Lambchop (como un huevo a una castaña el uno y el otro, sí) pero veamos de quiénes prescindo.
God bless you amigo, nos bendicen The Felice Brothers en su nuevo álbum, sólo un año después del experimento electrocountry que fue Celebration, Florida. Ahora retoman la ortodoxia de la americana más fina, la que les dio a conocer en el aclamado Tonight at the Arizona. Pero no voy a engañar a nadie, este nuevo trabajo no respira la misma grandeza que aquél, es un disco de transición y se nota en una cierta planicie de las canciones. En realidad, si nos ponemos precisos y acudimos a las propias palabras del grupo, God bless you amigo no es su nuevo disco, son sólo 8 canciones tradicionales y 12 originales grabadas sin demasiadas pretensiones, después de que un huracán les destrozara la caravana.
This made us go insane with laughter and play our favorite song, “Gulf Of Mexico” – which is also a known aid in exorcism – for what seemed like hours. The old fiddle tune had a strange power over the band, but our management convinced us that releasing a four-hour instrumental was a little too reckless, even for us.
Yo les agradezco que nos ahorraran esa versión de 4 horas de Gulf of Mexico, pero sobretodo agradezco que entre la hora de buena música que nos ofrecen haya temas tan suyos, tan buenos, como Lincoln Continental o Dream On.


Mount Eerie sacaron dos discos este año, aunque sólo incluí el Clear Moon porque es el que prefiero (el Ocean Roar mete demasiado ruido para mis delicados oídos de ninfa barbuda). Es una música frágil, que crece lenta y requiere de buenas condiciones para florecer, a saber: silencio alrededor, ánimo contemplativo y, no imprescindible pero sí recomendable, una luna resplandeciente en lo alto. Yo conseguí este escenario el pasado verano en Coruña del Conde, cuna del primer hombre que voló (pero esta es otra historia, que habrá de ser contada en ocasión más propicia), y puedo asegurar que es un discazo. Pasear por los campos dormidos bajo la luz de la luna mientras escuchaba Through the Trees pt. 2, la inquietante The Place Lives o la reposada Yawning Sky fue definitivamente uno de los mejores momentos, quizá el más mágico, de unas vacaciones fluctuantes, por no decir itinerantes.

Casualidades de la música, en el Grupo 2 el Voice of Ages, en el que The Chieftains celebran su 50 aniversario con una multitud de colaboraciones, ha ido a encontrarse precisamente con uno de esos colaboradores, Carolina Chocolate Drops. Los irlandeses son leyenda viviente y en el disco que nos ocupa la participación de gente como Imelda May, Bon Iver o The Decemberists da un toque distinto a sus canciones, pero no deja de ser un autohomenaje. ¡Y además hacen trampa llamando a todos esos amigos a la fiesta, así que descalificados por fulleros! Carolina Chocolate Drops llevarán un pedacito de tradición folk a la siguiente fase, junto a la preciosa Catherine Traicos.
Eso deja en la cuneta a Rufus Wainwright. Nunca le he seguido pero este año escuché su disco y no me disgustó. Qué poco entusiasta suena eso, ¿basta para incluirle en esta competición tan reñida? Por supuesto que no, si sólo fuera por eso no hubiera entrado: pero igual que ocurre con Mount Eerie, aunque en un contexto muy distinto, le debo una por haber acompañado una noche genial allí a principios de primavera, y yo pago mis deudas. No obstante, Rufus, el Torneo seguirá sin ti, tú estás ya Out of the game.

5 comentarios:

  1. menos mal que has salvado a lambchop jeje. yo con mount eerie nunca he podido y mira que es muy de mi estilo. esto se va poniendo dificil.. quedan más grupos pendientes ¿?
    besos.

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    1. Quedan sólo 4 grupos, que explicaré de una tacada en el siguiente post. Lambchop ha sido otro descubrimiento de este año y me parece tremendo.
      Petons!

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  2. Qué lástima que en el cartel del primavera haya tan pocos grupos de esta lista, podría salir un cartelazo. Qué penita que el de Black Prairie se quede fuera, pero era un grupo muy difícil. También me ha dolido lo de Chieftains. Pero sí, esta vez puedo estar más o menos de acuerdo con tus elecciones muchacho. Aunque todavía queda rencor por lo de The Stray Birds en mí :@ xd

    Bestiooos!

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  3. Quería decir "Besitos" que no "Bestios", ni era un llamamiento a ningún animal fantástico tipo "las bestias de los besitos" que eso, si sumamos ambas palabras -que, como todos sabemos, es la forma lógica de crear cualquier mitología nueva-, es lo que resultaría en un chispazo ple d'ingeny (catalá del meu, aixi, ben ficat); y que para qué iba a llamar yo a unos animelejos así tan raros a que te dieran besitos, pudiendo dártelos yo.
    Ahora sí, te mando un beso.

    Bestios, vuelvan a sus madrigueras. Disculpen ustedes el error: todavía no se os requiere.

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  4. Aún recuerdo cuando me pasaste Black prairie. Era, además un día gris y lluvioso, y en tal ambiente me entró directito, como si fueran las canciones que tenía necesidad de escuchar en ese momento. Incluso los temas instrumentales, son fantásticos!! La voz de la chica es preciosa, y hacen bien en ponerla porque sinó sería una versión de Decemberists y se confundirían, Colin Meloy tiene una voz demasiado reconocible e identificable al microsegundo. Me encanta el vídeo que has puesto (y dirás, lo sabía!!!).

    Sobre Felice brothers, te diré que el disco en conjunto finalmente se me hizo un poco pesadito, pero tiene dos o tres canciones que son preciosísimas.

    Aiiiishh el Valtari... Me gusta, porque Varud es una maravilla maravillosa de canción... aiii pero es que el disco, con el tiempo, se me hace un pelín irregular... Quizás sea la culpa haber topado en mi mp3 a la vez que el Takk...

    Otro beso!!!

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